Río Gallegos tiene una muy buena revista/libro que publica a quienes escriben ficción en la ciudad y alrededores: narrativa, poesía y una serie de artículos sobre escritura-literatura, “estructura periodística de sostén a esta rama”, según la Carta del Editor del primer número.
A comienzos de enero, Ariel Di Leo, su ideólogo y principal hacedor, presentó la segunda edición de La Rama (Verano 19/20), en la sala renovada –estilo café– de la Secretaría de Turismo de la provincia, a metros del Correo. Como todas las tardes de inicio de año en esta ciudad, la presentación transcurrió en un día de ritmos lentos y pausados. En ese entorno, y con la introducción de la pieza de jazz Summertime proyectada en video, Di Leo se dirigió a varios de quienes participan de esta segunda entrega de la publicación, presentes en la ocasión, para entregarles en mano un ejemplar del número que acababa de llegar a la ciudad, luego de palabras de satisfacción y agradecimiento.

Del staff periodístico de la revista, estaban en el café la docente Patricia Vega, una mujer de fluida interacción entre la academia y quienes hacen literatura en la región; y Carlos Besoaín, quien además de poeta y escritor, vale recordar que integró el staff de la revista Ventana Abierta, una publicación riogalleguense editada en los ’90 en la que publicó excelentes artículos.
También estaba Horacio Córdoba. El fotógrafo inaugura la sección Fotografía de La Rama con “Gelidus II”, una notable serie de imágenes de agua congelada del río Gallegos y Laguna Azul. La gráfica de la revista/libro es muy buena, con una estética cuidada y bien tratada (incluso en la contratapa de ambos números se publican una serie de acrílicos), por lo que las fotografías refuerzan el tratamiento estético además del literario.
Además de escritores legitimados por sus obras ya publicadas, como los casos de Cecilia Maldini y Sebastián Tresguerres, había entre los presentes algunos escritores nóveles que publican por primera vez en papel. Y aunque no estuvo en la ocasión, Di Leo tuvo especiales palabras de reconocimiento por el trabajo de curaduría que el poeta Jorge Curinao realizó en la sección Poesía de esta segunda edición.
*

Ariel y su hermano Sergio Di Leo, quien escribe otra de las secciones periodísticas de la revista, son dos personas de extensa trayectoria en el arte de editar libros y revistas en estas latitudes. Ariel, por ejemplo, trabajó en la única edición de Espacio Baldío, una revista literaria editada en mayo de 2016 por Pablo Lorenzo y Felipe Cervine, otras dos personas vinculadas a las actividades literarias en la ciudad. Espacio Baldío había sido pensada como una publicación bimensual.
Ariel cuenta que La Rama nace de aquella experiencia. En el texto de presentación del primer número (Invierno 2019), presentado en la última Feria Provincial del Libro, Di Leo escribe: “La etapa que culmina empezó hace tres años. Había colaborado en el aspecto gráfico con la revista literaria Espacio Baldío de los amigos Felipe y Pablo. Cuando se hizo evidente que por varias razones que no viene al caso ahondar, no iban a poder dar continuidad al proyecto, se despertó en mí la idea de encarar una publicación similar. No fue simple imitación. Yo había insistido machaconamente a los amigos con lo importante que para una revista es cubrir una necesidad concreta, llenar el espacio baldío al que parecía aludir el título. Embarrancado el proyecto, la necesidad seguía allí, y la herramienta estaba a la vista”.

“En nuestro entorno, en nuestra provincia, hay mucha gente leyendo. Los lectores que le faltan a los libros que están en los garajes. Esta revista (o cualquier otra publicación literaria) es un puente que acorta las distancias entre dos actores que se desconocen, pero que se sospechan”. Aunque su explicación es más extensa, vale la cita: en este fragmento del texto de presentación Di Leo cuenta los numerosos casos que conoce de libros editados aquí en Santa Cruz que terminan apilados en la habitación de una casa, o en una oficina pública, sin llegar jamás a los potenciales lectores.
“La Rama es como una foto de lo que se escribe en este momento en Santa Cruz”, resume el autor en una de las entrevistas radiales que le realizaron en las últimas semanas en LU14. En esas charlas radiales, Di Leo parece tener muy claro el desafío: un trabajo de este tipo es colectivo o no lo es, y deberá convivir con los vaivenes propios de un país como el nuestro (el número dos tiene un valor de 550 pesos, mientras que el primero, editado en el invierno pasado, de 300).
*
El autor sabe que, más allá de la satisfacción por la labor realizada que se ve reflejada en la revista que llega a nuestras manos, el trabajo está en sostener la empresa. Más –agrega quien escribe esta reseña– en tiempos en los que Internet está arrasando, tal vez de manera definitiva, con las revistas de papel.
Por lo pronto nosotros, lectores de literatura y periodismo, amantes de la tinta, apoyemos esta noble iniciativa.

(La Rama está disponible en las librerías Martín Fierro y Distribuidora AC Santa Cruz; también en PDF y a través de Mercado Libre. En el Facebook personal de Ariel Di Leo encuentran disponible toda la información al respecto).