Campeones del Mundo

Nuestra fortuna es inmensa.

La Scaloneta, la del Angelito, la del Messías del fútbol.

Pelota al pie, para ir directo al corazón.

Porque debajo de la camiseta, no olvidemos, hay siempre un pecho humano.

«Nadie más serio que un niño cuando juega», respondió Cortázar una vez.

Seamos felices, que vale la pena.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s